En una ceremonia solemne llevada a cabo en el Ministerio de Relaciones Exteriores este viernes 17 de octubre, el Estado Plurinacional de Bolivia confirió la prestigiosa Legión de Honor “Mariscal Andrés de Santa Cruz y Calahumana” en el grado de oficial al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), en reconocimiento a sus cinco décadas de labor ininterrumpida y contribuciones fundamentales al desarrollo, la democracia y la paz en el país.

La condecoración, una de las más altas distinciones del Estado boliviano, fue otorgada en reconocimiento al rol histórico del PNUD como un "actor fundamental para el fortalecimiento democrático y la cultura de paz". El acto, organizado por la Dirección General de Ceremonial del Estado Plurinacional del Ministerio de Relaciones Exteriores, contó con la presencia de jefes de misión de embajadas, organismos internacionales acreditados en Bolivia y representantes de la sociedad civil.

Durante el acto oficial de entrega, la Representante Residente de PNUD en Bolivia, Renata Rubian, agradeció el reconocimiento, destacando el aporte del equipo humano que durante este tiempo ha aportado significativamente al desarrollo de diferentes programas y proyectos.

“El PNUD en Bolivia está muy honrado por recibir este reconocimiento porque es un símbolo de una historia construida por esta oficina en 50 años”, señaló Rubian.

Alianza por el desarrollo

El PNUD inició sus operaciones en Bolivia el 31 de octubre de 1974 y desde entonces su trabajo ha estado intrínsecamente ligado a los hitos históricos y desafíos del país. Entre algunos de los hitos claves de su trabajo se puede destacar:

• Protección de derechos humanos durante dictaduras militares (1980-1983): Brindó refugio a perseguidos políticos y apoyó procesos democráticos en períodos de represión.

• Consolidación democrática: Facilitó diálogos cruciales durante las crisis políticas de 2000-2005 y 2019, promoviendo acuerdos y pacificación.

• Generación de conocimiento: La elaboración de los Informes sobre Desarrollo Humano desde 1990 ha sido fundamental para diagnosticar y orientar políticas públicas en pobreza, desigualdad y desarrollo inclusivo.

• Respuesta a emergencias: Jugó un rol protagónico durante la pandemia de COVID-19, adquiriendo y distribuyendo equipos médicos esenciales.

• Fortalecimiento institucional y legal: Apoyó técnicamente la creación de leyes clave, como el Código Niño, Niña y Adolescente y la Ley 348 contra la violencia hacia las mujeres.

• Impulso a la Agenda 2030: Ha sido un socio estratégico para la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en el país.