El nuevo Informe sobre Desarrollo Humano 2025 del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) posiciona a Uruguay en el puesto 48 entre 193 países y territorios, con un Índice de Desarrollo Humano (IDH) de 0,862. Este valor sitúa al país en la categoría de desarrollo humano muy alto, reafirmando una tendencia de mejora sostenida desde 1990.

El IDH es una medida compuesta que evalúa el progreso de los países en tres dimensiones fundamentales: salud (a través de la esperanza de vida al nacer), educación (medida por los años esperados y promedio de escolarización) e ingreso (calculado por el ingreso nacional bruto per cápita).

En el caso de Uruguay, entre 1990 y 2023 la esperanza de vida creció en 5,14 años, los años esperados de escolarización aumentaron en 4,52 años, y el ingreso per cápita se incrementó más de un 110%. Estos avances explican el aumento de su IDH en un 20,9% durante el período.

Indicadores complementarios para una mirada integral
El informe incluye también otras métricas que complementan la medición del desarrollo humano, considerando aspectos vinculados a la equidad, la sostenibilidad y las normas sociales.

El Índice de Desarrollo Humano ajustado por Desigualdad (IHDI) permite estimar el nivel de desarrollo considerando cómo se distribuyen los logros entre la población. En Uruguay, la pérdida por desigualdad es del 13,34%, lo que ajusta el índice a 0,747.

En materia de género, el Índice de Desarrollo de Género (GDI) compara los logros entre mujeres y hombres. El valor registrado para Uruguay en 2023 es de 1,017, lo que indica una ligera ventaja de las mujeres en los componentes evaluados, ubicando al país en el grupo con mayor paridad.

Por su parte, el Índice de Desigualdad de Género (GII) —que evalúa dimensiones como la salud reproductiva, el empoderamiento y la participación en el mercado laboral— presenta para Uruguay un valor de 0,218, con un lugar 56 entre 172 países.

El informe también incluye el Índice de Normas Sociales de Género (GSNI), que refleja la presencia de sesgos sociales en relación con la igualdad de género en ámbitos como la política, la economía, la educación y la integridad física.

En cuanto al impacto ambiental del desarrollo, el Índice de Desarrollo Humano ajustado por Presiones Planetarias (PHDI) tiene en cuenta las emisiones de dióxido de carbono y la huella material por habitante. Para 2023, el valor de Uruguay se ubica en 0,680, por debajo de su IDH, reflejando las presiones existentes sobre el ambiente.

Finalmente, el Índice de Pobreza Multidimensional (MPI) —que examina privaciones simultáneas en salud, educación y condiciones de vida— no fue calculado para Uruguay en esta edición.

Desarrollo humano centrado en las personas

Los resultados del informe reflejan los logros sostenidos de Uruguay en diversas dimensiones del desarrollo humano, al tiempo que permiten identificar áreas prioritarias para profundizar los avances. Como cada año, este análisis busca aportar insumos útiles para la formulación de políticas públicas que coloquen a las personas en el centro de las decisiones, promoviendo una vida más plena, justa y sostenible. .