En los últimos años, debido al cambio climático, los eventos hidrometeorológicos se han vuelto más frecuentes y severos. La alerta de El Niño Costero aún se mantiene en el país.

Diversos estudios sobre el impacto de los desastres en las poblaciones han evidenciado que sus vulnerabilidades y capacidades no son homogéneas. Este es el el caso de regiones como Amazonas y San Martin, ubicadas al norte de la Amazonía peruana, donde además de prevalecer brechas de desigualdad estructural, presentan altos índices de pobreza, mortalidad infantil, desnutrición crónica, anemia, entre otros. Entonces, al momento de enfrentar desastres, estas condiciones, entre otros factores, dificultan sus capacidades para responder y recuperarse de las crisis.

Frente a estos múltiples desafíos, que amenazan el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), la Unión Europea y agencias del Sistema de las Naciones Unidas*, a través del proyecto “Fomento de acciones de preparación para la respuesta y recuperación temprana para aumentar la resiliencia ante múltiples riesgos en las comunidades urbanas y periurbanas de las regiones de Amazonas y San Martín”, vienen trabajando en 6 provincias y 8 distritos de ambas regiones, para el  fortalecimiento de su capacidad de preparación para la respuesta y la recuperación temprana. De este modo, mediante estas acciones se busca reducir el impacto de los desastres en las vidas de las personas y sus medios de vida.

Esta semana, junto al Departamento de Protección Civil y Ayuda Humanitaria de la Comisión Europea (ECHO), diversas agencas de la ONU en el país, junto a autoridades regionales y locales y representantes de las comunidades, vienen participando de espacios de intercambio sobre las acciones desarrolladas en el marco del proyecto. El objetivo es dar a conocer los avances de la iniciativa y destacar la importancia de la preparación para la respuesta y para la recuperación temprana.