El futuro llega hoy: Prospectiva en acción (Segunda parte)

En la primera entrega de esta serie repasamos el ejercicio de prospectiva que desde el Laboratorio de Aceleración propusimos para uno de los proceso de planteamiento estratégico más importantes de PNUD en Perú: la formulación del Documento de Programa País (CPD por sus siglas en inglés).

Este documento, que guiará el trabajo de la organización en los próximos cinco años, nace en medio de un panorama donde los efectos de la COVID-19 han dificultado aún más el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y a puertas del cambio de gobierno.

Si bien un contexto incierto como este no es requisito para utilizar metodologías de prospectiva, estas definitivamente ayudan a entender información poco estructurada y aparentemente inconexa. Por esta razón, el Laboratorio lanzó este ejercicio de escaneo de horizontes que contribuye al CPD y al mismo tiempo sirve como “brújula” para apoyar a todos los equipos de la oficina del país en los próximos años. En esta segunda entrega traemos los resultados iniciales de este proceso: Cuáles señales vimos, qué tendencias encontramos, y los escenarios que construimos.

Tejiendo las señales

Planeamos dos semanas para la recolección de señales y sesiones informales de preguntas y respuestas a fin de que nuestros colegas tuvieran tiempo para identificar las señales en sus vidas diarias, ya sea en el trabajo, navegando en la web o incluso observando lo que hacen sus familias. Los resultados iniciales arrojaron más de 200 señales, que fueron sintetizadas en siete tendencias:

●      Vida digital: Es una tendencia que subyace las otras seis tendencias en tanto la pandemia ha evidenciado cómo la brecha digital es la nueva brecha económica y social. A esto se suma que tener un celular o acceso a Internet no es suficiente si no está acompañado de los conocimientos necesarios para ser un ciudadano digital. ¿A quién estamos dejando aún más atrás? ¿Cuánto tiempo tardaremos en cerrar esta brecha?

●      Nuevas identidades: La forma de vernos a nosotros mismos está siendo redefinida por la ampliación del acceso de Internet (aunque todavía limitado) en todo el país, sumado al regreso a zonas rurales de jóvenes que viajaron a centros urbanos para tener mayores oportunidades educacionales y profesionales, que luego se vieron frustradas por la pandemia. Adicionalmente las identidades se radicalizan debido a campañas electorales que utilizan más que nunca las redes sociales dada la imposibilidad de llevar a cabo eventos masivos. ¿Es la oposición a otro el único camino que tenemos hoy para definir nuestra identidad?

●      Nuevas organizaciones sociales: Sin una jerarquía clara, flexible, temporal y crowdsourced, estas organizaciones no están siendo entendidas al 100% por contrapartes más tradicionales como los partidos políticos. Estas surgen de manera descentralizada para solucionar problemas sociales y políticos mientras se mantienen en contacto con grupos similares alrededor del mundo. Si este es el futuro de las organizaciones sociales, ¿cómo podemos aprender de su adaptabilidad y énfasis en las poblaciones más vulnerables al mismo tiempo que impulsamos su participación en diálogos sobre soluciones de largo plazo?

●      Priorizar la salud mental: Mientras los peruanos privilegiados no saben si trabajan desde casa o si viven en el trabajo; los más vulnerables no pueden darse el lujo de considerar su salud mental mientras se derrumban las frágiles estructuras de apoyo que los rodean. ¿Cuál será el impacto a futuro en la sociedad, economía y política?

●      Política de la desconfianza: Perú es uno de los países con menor índice de confianza interpersonal según el Latinobarómetro, lo cual sorprende poco dada la seguidilla de escándalos de corrupción de las últimas décadas. Sin embargo, las generaciones más recientes no sólo han experimentado la desconfianza, sino que han nacido y crecido en ese contexto de sospecha hacia el sistema político y desilusión con sus autoridades. ¿Qué significa esto para el futuro de nuestra democracia?

●      Sostenibilidad por necesidad: En los primeros días de inmovilización social vimos el cielo azul y ríos limpios, y nos maravillamos ante la capacidad del planeta de renovarse a sí mismo. Si la pandemia fue una señal de alarma, ¿mantendremos un compromiso con la sostenibilidad ambiental cuando lo peor de la crisis haya terminado y aumente la presión por recuperar el PBI perdido?

●      Nuevos medios de vida postpandemia: Sólo porque alguien vende sus productos por redes sociales no significa que es una empresa digital. Estos pequeños negocios online y descentralizados, aunque también informales y de subsistencia, ¿representan el inicio de una nueva economía digital peruana o desaparecerán cuando se levanten las restricciones de la pandemia?

Aunque estas tendencias no son exclusivas del Perú, la forma en la que impactan e interactúan con el contexto en el que opera PNUD sí es específica para el país.  Por esto resultaba importante iniciar la conversación sobre qué tan preparada está la oficina del país para enfrentar estas tendencias y qué oportunidades y retos podríamos encontrar en los próximos años. Sin embargo, no es igual de útil tener esta reflexión fuera de situaciones concretas que nos ayuden a sentir el futuro, por lo que preferimos construir escenarios en la intersección de nuestras siete tendencias locales y las tendencias globales identificadas por la sede de PNUD como parte del planeamiento estratégico para 2022-2025 (ver adjunto). ¿Por qué consideramos estos dos grupos de tendencias y no sólo las tendencias locales? Las tendencias locales y globales se retroalimentan y son similares, pero aún más importante, la oficina de Perú vive en un “sándwich” entre estas tendencias:

Se necesitan (tres) para bailar tango: Construyendo escenarios

Como parte de las metodologías de inteligencia colectiva utilizadas para las reuniones preparatorias para el CPD, nuestros colegas participaron en un taller de construcción de escenarios donde pudieron imaginar un futuro con ventajas y desventajas, y debatir sobre posibles áreas de mejora para la oficina del país. Cada sala de Zoom trabajó con un horizonte de cinco años y tres tendencias (dos locales y una global) para trabajar, y cada escenario debía tomar en cuenta el espectro del trabajo de PNUD en el país.

Este gráfico es una representación visual que planteamos a los colegas de la oficina de Perú para hacer inicialmente una lluvia de ideas y redactar borradores de escenarios, y luego actuar como “abogados del diablo” para identificar brechas que puedan convertirse en oportunidades para nuestros proyectos y procesos. Estos son dos de los cinco escenarios que construimos:

●      En el 2026 la población más vulnerable del país aún no logra superar el impacto de la pandemia. Pero los avances que se observan son liderados por mujeres, quienes se han organizado en colectivos y redes de soporte pese a que se mantiene la precarización del empleo. Las soluciones no tradicionales surgen en el campo educativo y los privados buscan solucionar la falta de talentos específicos mediante educación online, desplazando a la educación formal universitaria. Se descentraliza el reclutamiento de talento a nivel nacional pero al mismo tiempo se amplía aún más la brecha digital en zonas rurales evidenciada durante la pandemia.

●      En el 2026 incrementa la participación directa de nuevos actores en el debate sobre acuerdos multilaterales mediante de plataformas digitales, lo que incluye también colectivos conservadores y reactivos frente a la expansión de derechos. La brecha digital implica que ciertos grupos quedan fuera de la discusión a nivel nacional y global a pesar del surgimiento de nuevas govtech impulsadas por el interés del gobierno para responder a demandas ciudadanas y a nuevas identidades.

En las próximas semanas trabajaremos con nuestros equipos en la oficina de país para adaptar los aprendizajes de este ejercicio para sus proyectos actuales y futuros, siempre tomando en cuenta los objetivos y resultados esperados del CPD, y en los próximos meses estaremos compartiendo un reporte completo sobre las señales, tendencias y escenarios. Si quieres contarnos sobre tu propio trabajo con prospectiva, conocer más sobre el trabajo del Laboratorio de Aceleración en Perú, o proponernos una colaboración, ¡escríbenos a acclab.pe@undp.org!