Hoy se llevó a cabo en Quito el lanzamiento del Proyecto FARM Ecuador, cuyo objetivo es prevenir el uso de plaguicidas de alta peligrosidad, creando prácticas innovadoras y sostenibles de producción y mejorando el acceso a financiamiento para pequeños agricultores. Esta es una iniciativa del Fondo Mundial para el Medio Ambiente, y es liderada por el Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica, en coordinación con el Ministerio de Agricultura y Ganadería. El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) apoyará como agencia implementadora.
El proyecto cuenta con un presupuesto de 29 millones de dólares aportados desde la cooperación internacional y socios del proyecto, y desarrollará tres acciones principales hasta 2028; trabajará en los marcos de política e inversión que mejoren la gestión racional de agroquímicos nocivos; promoverá la adopción de alternativas innovadoras y seguras para mejorar el entorno en el que trabajan casi 2 millones de personas en el sector agrícola; y desarrollará plataformas de información y manejo del conocimiento para ayudar en la toma de decisiones, y mejorar la ampliación, replicación y el impacto de FARM.
De acuerdo con un informe de la Unión Europea, Ecuador está categorizado como el octavo país de América Latina y el Caribe con la tasa más alta de uso de pesticidas por hectárea de tierra cultivada. El uso de estas sustancias compromete la calidad del suelo, agua y microflora, poniendo en riesgo el ambiente y salud de las personas que se dedican a la agricultura.
Ecuador suscribió el Convenio de Estocolmo sobre contaminantes orgánicos persistentes, plaguicidas y productos químicos peligrosos, de modo que en sus políticas públicas debe promover un uso responsable de estas sustancias.