Los resultados agregados revelan un desempeño económico moderadamente creciente:

· El volumen de negocios de las empresas creció 5% en el primer semestre y 5,6% en el segundo, con especial dinamismo en los sectores de servicios y manufactura.

· El empleo privado mostró una trayectoria positiva, pasando de un incremento del 1,1% a un 5,3% semestral, lo que indica un proceso de recuperación sostenida del mercado laboral.

· Las remuneraciones mensuales aumentaron de manera progresiva en todos los niveles ocupacionales, reflejando una mejoría general en las condiciones laborales.

· Las expectativas empresariales para 2025 proyectan un crecimiento del 12,1%, con agricultura y servicios como sectores líderes.

Estos indicadores confirman el compromiso del empresariado regional con la recuperación económica y la superación de los retos históricos de la zona.

Desafíos y oportunidades

El análisis de los principales factores que limitan la competitividad señala áreas prioritarias para la acción conjunta:

· Acceso a financiamiento bancario, mejora de servicios públicos básicos y reducción de la presión fiscal son demandas comunes en todos los sectores productivos.

· La capacidad ociosa, superior al 50%, representa una oportunidad para dinamizar inversiones, innovar procesos y optimizar infraestructura existente.

· La escasez de combustible y los cortes eléctricos siguen teniendo un impacto directo sobre la productividad, especialmente en las áreas de comercio, servicios y agricultura.

Responder de manera estructural a estos retos es clave para aprovechar plenamente el potencial productivo del estado.

Comercio binacional

La relación bilateral es ampliamente valorada por el empresariado, y existe un respaldo significativo a propuestas como la importación de energía eléctrica desde Colombia, la activación de una zona económica especial binacional y la creación de un Centro de Análisis Fronterizo que provea datos estratégicos para la toma de decisiones compartidas.

Estos elementos configuran una plataforma realista y prometedora para transformar la frontera en un polo de integración productiva y desarrollo territorial.

Se invita a utilizar estos hallazgos como insumo estratégico para impulsar nuevas políticas públicas, fortalecer el diálogo y diseñar rutas que conviertan al Táchira en una referencia de desarrollo productivo, equitativo y sostenible.