Rumbo a la COP30: El liderazgo de las mujeres en políticas de clima y energía toma protagonismo

3 de Noviembre de 2025
Group photograph of a diverse crowd posing in a brick archway hallway.

Al fortalecer el liderazgo y las capacidades técnicas de las mujeres en la región, el curso busca garantizar que las agendas de clima, energía y biodiversidad sean no solo ambiciosas, sino también equitativas.

Bogotá, Colombia — Este pasado 27-29 de octubre de 2025, líderes regionales, tomadores de decisiones y defensoras de la igualdad de género se reunieron en el Curso Regional de Liderazgo de Mujeres: Impulsando una transición energética y climática justa, inclusiva y resiliente en América Latina y el Caribe co-organizado por el PNUD junto con el Programa de Acción para la Diplomacia Climática y el proyecto Interfaz IKI implementado porla Cooperación Alemana para el Desarrollo- GIZ  en el marco dela Alianza por el Clima y una Transición Energética Justa entre Alemania y Colombia. El evento, el cual tuvo lugar en el Hotel Embassy Suites Bogotá by Hilton Bogotá, Colombia fue un espacio para catalizar acciones transformadoras, bajo el liderazgo de mujeres en toda la región, en los sectores de energía, clima y biodiversidad. 

A pesar del potencial de la región para liderar en energías renovables y conservación de la biodiversidad, las mujeres siguen estando subrepresentadas en sectores clave. Solo el 20% de la fuerza laboral en energía está compuesta por mujeres, y más del 70% de las PYMEs lideradas por mujeres carecen de servicios financieros adecuados. Las barreras estructurales, las responsabilidades de cuidado y el acceso limitado a carreras CTIM continúan restringiendo su participación en industrias verdes. Sin una integración deliberada del enfoque de género, los beneficios de las transiciones climáticas y energéticas podrían excluir a la mitad de la población.

Durante la sesión inaugural, las participantes conocieron sobre el reciente Informe Regional sobre Desarrollo Humano 2025 del PNUD, que advierte sobre presiones sin precedentes que amenazan con revertir décadas de avances en desarrollo humano en América Latina y el Caribe. En medio de crisis superpuestas y vulnerabilidades estructurales, la transición hacia energías verdes representa una oportunidad única para promover políticas inclusivas que coloquen la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en el centro de la acción. Este enfoque se alinea con el concepto de resiliencia, entendida no solo como la capacidad de resistir los impactos de las crisis, sino de transformarse de manera sostenible, equitativa y justa. 

La inauguración contó con palabras de apertura por parte de representantes del Ministerio de Energía y del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia, junto con Vietnam Pereira Poveda, oficial de cooperación de la Embajada de Alemania, y Claudio Tomassi, Representante Residente del PNUD. La conferencia magistral estuvo a cargo de Marcela Guerrero, economista y ex Ministra de la Condición de la Mujer de Costa Rica, quien abordó el vínculo entre el cuidado y la sostenibilidad en las políticas públicas. Posteriormente, se desarrolló un panel con la participación de Carmen Stibel Duarte, Directora de Cambio Climático y Gestión del Riesgo del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia; Josefina Klinger, lideresa ambiental; Elena Fernández, Coordinadora del Clúster Verde de GIZ Colombia; y Jimena Puyana, Oficial de Ambiente del PNUD Colombia moderado por Guillermina Martin, del PNUD para América Latina y el Caribe.

Con su experiencia en liderazgo, igualdad de género y acción climática, el PNUD estuvo a cargo de la dimensión pedagógica, metodológica y el acompañamiento a las participantes. Por su parte, el proyecto Interfaz IKI, implementado por la Cooperación Alemana para el Desarrollo – GIZ, lideró la integración del curso en el marco de la diplomacia climática y la transición energética justa, promoviendo el intercambio entre países de América Latina y el Caribe y actores estratégicos. Como país anfitrión, el Gobierno de Colombia brindó el espacio institucional y simbólico para fortalecer la cooperación regional en materia de género y clima.

Al fortalecer el liderazgo y las capacidades técnicas de las mujeres en la región, el curso busca garantizar que las agendas de clima, energía y biodiversidad sean no solo ambiciosas, sino también equitativas. A través del diálogo, la mentoría y la colaboración, esta iniciativa aspira a consolidar una red resiliente de mujeres líderes preparadas para construir un futuro sostenible en América Latina y el Caribe.

Las mujeres indígenas, las campesinas, las afro y las de la empresa y el gobierno somos todas diferentes, necesitamos cosas distintas y lideramos diferente. Aquí lo que vimos es que no es cada una en su problema, que juntas jalamos más duro. Hay que dejar de ser cada una en su problema y más bien jalar juntas para ayudarnos todas. - Mujer indígena de Colombia.

Al finalizar el proceso, las participantes no solo contarán con conocimientos y herramientas técnicas, sino que integrarán una red regional de liderazgo femenino comprometida con acelerar la acción climática con justicia de género. Esta red será un espacio dinámico de intercambio, mentoría y colaboración, capaz de incidir en políticas nacionales, tender puentes entre sectores y visibilizar el aporte de las mujeres a la sostenibilidad del planeta. 

Yo como empresaria aprendí mucho de todas ustedes, escucharlas, sentirlas y entenderlas no solo como lideresas, sino como mujeres, como cada una. Eso me enriquece muchísimo y ahora mi compromiso es fortalecer nuestro conocimiento de las lideres comunitarias para apoyarlas mejor. – Norma Alicia Ramírez Hinojosa, empresaria mexicana. 

El proceso continuará con un programa virtual de capacitación y acompañamiento de seis semanas, diseñado para consolidar aprendizajes, compartir experiencias locales y potenciar la articulación entre las participantes a través de herramientas prácticas y un acompañamiento continuo. Este curso no es solo una iniciativa de formación: es una apuesta por un nuevo paradigma de liderazgo feminista, ambiental y transformador, que reconoce que cuidar la vida y cuidar el planeta son la misma tarea. 

Este encuentro se alineó con hitos regionales y globales clave, como la próxima COP 30 en Brasil, la actualización de las Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDCs), y el 30 aniversario de la Declaración de Beijing. Asimismo, refuerza el Compromiso de Tlatelolco, que impulsa una década de acción para acelerar la igualdad sustantiva y construir una sociedad del cuidado.