Vidas que crecen, comunidades que crean: impulso al sector privado para el desarrollo territorial en Cuba 

3 de Febrero de 2025
Emprendedora de Caibarién, Villa Clara.

Una cuna para bebés, una bolsa tejida para las compras, un juguete y un sombrero. El portal de Madelaine está lleno de colores. Ella acomoda los productos mientras responde las preguntas de las personas que pasan.

Madelaine Rojas comenzó su emprendimiento buscando pequeñas alianzas con productores locales. Con sus ingresos, cuida a su madre mayor y acompaña causas como la protección animal.  

En las calles del que una vez fue uno de los principales puertos de Cuba, este y otros emprendimientos constituyen una fuente de ingresos esencial para muchas personas de la comunidad. Sin embargo, no contaban con acceso a conocimientos para que sus proyectos pudieran ser sostenibles.

Hace unos meses, el emprendimiento de Madelaine fue seleccionado para formar parte de la experiencia de implementación de En Marcha, una metodología del Programa ODS Cadenas de valor del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, PNUD. Esta propuesta es aplicada en 16 países del mundo y busca apoyar la capacidad de crecer de pequeños negocios locales.

“Me ha sido muy útil porque yo tenía un desconocimiento prácticamente total del tema”, dice Madelaine, “ahora llevo un registro de ventas, sé con claridad lo que más se vende y puedo clasificarlo por grupos etarios y preferencias”.

A person in a straw hat organizes colorful items on wooden shelves outdoors.
A woman in a hat organizes items in a vibrant outdoor market, with colorful bags hanging nearby.

Como el de Madalaine, otros 22 emprendimientos en las localidades de Caibarién en Villa Clara y Holguín, en la provincia del mismo nombre, han accedido a la implementación de la experiencia piloto de la metodología “En Marcha”. Tres de cada cuatro de estos emprendimientos seleccionados son liderados por mujeres y uno de cada tres es liderado por personas menores de 35 años.

Esta es una de las soluciones que el proyecto Mi Emprendimiento ha implementado, en los últimos dos años, para impulsar la contribución del sector privado nacional a las estrategias de desarrollo territorial de cuatro provincias de Cuba, Pinar del Río, Villa Clara, Holguín y Granma.

El proyecto es una labor del Ministerio de Economía y Planificación y su Instituto Nacional de Investigaciones Económicas, los gobiernos de esos territorios; así como el PNUD y el apoyo de la Agencia Sueca para el Desarrollo Internacional, ASDI.

Las acciones realizadas incluyen formación de capacidades para personas emprendedoras, asesoras de negocios y representantes de autoridades a nivel provincial y municipal; el acompañamiento técnico a emprendimientos en las modalidades En Marcha, e Iniciando y Creciendo con su negocio. También, la identificación y atención a desigualdades de género en el acompañamiento a la contribución de estos nuevos actores económicos, así como la implementación de la primera experiencia piloto de otorgamiento de microcréditos a MiPymes. 

Se crece con muchas manos  

Ariel Martinez y Miguel Rodriguez se reúnen temprano en el patio del primero, frente al antiguo espigón donde atracaban los barcos en la bahía de Caibarién, Villa Clara. Hoy es el punto de partida de algo distinto. Ambos caminan varias cuadras adentro y visitan distintos portales, donde personas emprendedoras tienen sus negocios: una ferretería, una carpintería, vinos artesanales, colgantes de pared, ropa, barras de maní. Cada negocio tiene sus propios retos e historias de crecimiento que Ariel y Miguel han sabido escuchar y darles una guía.

“Tras un proceso de diagnóstico, determinamos negocios en los cuales la sinergia entre ellos fuera factible, o sea de que unos aprendan del otro, que no compitan entre sí. Pusimos énfasis en mujeres emprendedoras, personas jóvenes o al cuidado de personas vulnerables”, explica Ariel Martínez jugando con los gatos del portal de Madelaine Rojas.

22 emprendimientos en las localidades de Caibarién en Villa Clara y Holguín en la provincia de Holguín han accedido a la implementación de la experiencia piloto de la metodología “En Marcha” 

Después de varios meses de preparación, Miguel y Ariel se graduaron como Asesores del Programa En Marcha, junto a otras ocho personas de las cuatro provincias participantes del proyecto. Hoy son capaces de aplicar esta experiencia por sí mismos y replicar la formación a otras personas, con el acompañamiento en la formación del Centro regional del PNUD para América Latina.

“Trabajamos con ellos de varias formas, primero el intercambio personal, de tú a tú. Se estudiaron las fortalezas y las debilidades del emprendimiento y a partir ahí se hizo un plan de mejora para buscarle una solución a dichas debilidades. En todo momento hemos estado intercambiando con el equipo que nos formó que también ha venido acompañando el proceso el proceso”, comenta Miguel en referencia al equipo de asesores de PNUD y a las autoridades locales. 

Infographic displaying results and benefits of a program in Cuba, with statistics and icons.

Algunos resultados de la aplicación piloto de la metodología de En Marcha en Caibarién y Holguín, Cuba.

Pequeñas acciones, grandes impulsos 

El proyecto además ha acogido una iniciativa para la identificación y atención a desigualdades de género en el acompañamiento a la contribución de los nuevos actores económicos. Por ello, a través de talleres, 25 mujeres titulares de negocios han fortalecido su autonomía y sus capacidades técnicas para desempeñarse en sus emprendimientos. Del mismo modo, 25 hombres dueños de negocios se han capacitado para promover masculinidades positivas en sus espacios.  

Estas acciones se suman a la implementación de siete cursos a través de convocatorias abiertas en las cuatro provincias de proyecto, los cuales capacitaron a 628 personas emprendedoras, de ellas 46% mujeres y 42% jóvenes, facilitando acceso a conocimientos actualizados en temas jurídicos, financieros, marketing y gestión empresarial. 

A woman in an apron serves coffee to a smiling customer at a café counter.

Linnet García hernández y su hija, han participado en las acciones formativas que han contribuido a su autonomía y capacidades técnicas para la gestión de su negocio.

"Particularmente interesante fue el de responsabilidad social porque me hizo consciente de acciones que realizaba y me ha abierto líneas de trabajo y producción nuevas. Dónde puedo aprovechar materiales locales como el recebo, ser respetuoso con el medio ambiente y cómo conectarme mejor en el entramado productivo” Explica Lucio Pérez quien ha participado en varios de estos cursos en temas como estudios del mercado, gestión financiera, evaluación financiera de inversiones, entre otros.

Los materiales producidos por su empresa, ONIX SURL, se distribuyen en los espacios de comercialización a la población, así como a sectores productivos que apoyan la construcción de viviendas de sus trabajadores, como el agrícola.

a person using a laptop

La experiencia piloto de microcréditos a MiPyMes, Crece, contaba con más de una decena de otorgamientos tras dos semanas de implementación.

A inicios de enero del 2025, en Bayamo, fue presentado el primer producto de microcréditos para MiPymes, otorgado por la Unidad de Negocios del Banco Popular de Ahorro (BPA) de esa localidad. La experiencia piloto contaba con más de una decena de otorgamientos tras dos semanas de implementación.  

A este resultado se llegó tras meses de trabajo técnico y de capacitaciones con especialistas de BPA y el Banco Central de Cuba, en alianza con la Fundación de las Cajas de Ahorro Alemanas para la Cooperación Internacional. (Sparkassen).   

El proyecto Mi Emprendimiento se ha propuesto contribuir a que MiPyMES y otros emprendimientos se inserten en el tejido productivo de los territorios cubanos donde se implementa, por medio del despliegue efectivo de un marco institucional promotor de alianzas público-privadas.

En ese escenario, se plantea impulsar la equidad y el empoderamiento de las mujeres en el desarrollo sostenible local y fomenta prácticas de economía verde.

Estas acciones forman parte del conjunto de actividades con que el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en Cuba, impulsa la articulación del sector privado nacional en los esfuerzos las metas de desarrollo sostenible del país.  

10 personas se graduaron como asesoras Programa En Marcha, en las cuatro provincias participantes del proyecto. En la segunda foto, Miguel y Ariel conversan con un emprendedor en Caibarién, Villa Clara.