El rol de la innovación en la construcción de las democracias del futuro
Abordar el reto de la participación
12 de Septiembre de 2025
En un momento en el que la gobernanza democrática está bajo una gran presión en todo el mundo, la innovación no es opcional, sino esencial.
Como se señala en el informe Civic Engagement in Action: Stories from the Field (Implicación cívica en acción: historias del terreno; enlace disponible en inglés), la inclusión y la participación son el pilar fundamental de la labor del PNUD en gobernanza. Desde las actividades para amplificar las voces de las personas con discapacidad en la Argentina hasta los mecanismos para conectar a los jóvenes con los parlamentarios en Timor-Leste, el compromiso del PNUD es claro: cada voz cuenta.
No obstante, he aquí el reto: si bien la participación es fundamental, también es difícil de lograr. En todo el mundo, quienes se encargan de formular las políticas se enfrentan al “reto de la participación”. La implicación de la población es crucial, pero a la vez compleja y dificultosa.
Los obstáculos que debemos superar
Tras décadas de trabajo con socios en diferentes regiones y contextos, el PNUD ha identificado seis obstáculos persistentes que entorpecen la participación eficaz:
- Las asimetrías de poder
La desigualdad está siempre presente. Algunas voces tienen mucho más peso, mientras que otras tienen dificultades para ser oídas. Resulta fundamental diseñar procesos que garanticen una igualdad de condiciones para que todas las personas tengan la oportunidad de expresarse y ser escuchadas. - La complejidad
Las cuestiones de políticas suelen ser complejas y técnicas. El diálogo debe estructurarse de un modo que sea riguroso y preciso, pero, al mismo tiempo, accesible e inclusivo. - La polarización
Cuando las sociedades están divididas, el diálogo se vuelve tenso. Una toma de decisiones inclusiva es difícil de lograr cuando las personas no reconocen la legitimidad de otros puntos de vista. - La falta de confianza
La confianza es notablemente frágil. Las instituciones deben esforzarse más que nunca para dar ejemplo de transparencia, integridad y capacidad de respuesta. - Los tiempos en conflicto
Mientras que la formulación de las políticas suele exigir pensar a largo plazo, las personas suelen buscar resultados inmediatos. Encontrar un equilibrio entre ambos tiempos es fundamental para mantener la participación activa y significativa. - La velocidad y escala
Una participación genuina exige recursos y tiempo. En un mundo que evoluciona rápidamente, no es fácil conciliar la necesidad de velocidad y escala con las limitaciones de tiempo y recursos que tienen las instituciones públicas.
No se trata de preocupaciones abstractas, sino de realidades concretas que se viven en las comunidades de todo el mundo. Y si no las abordamos, incluso los esfuerzos más bien intencionados pueden terminar generando exclusión, frustración o, directamente, fracasar.
De los desafíos a las oportunidades
El primer paso para afrontar estos desafíos consiste en garantizar el respeto de todos los derechos humanos, incluida la libertad de expresión, de asociación y de reunión pacífica. Los espacios cívicos deben protegerse (enlace disponible en inglés), y los entornos de información deben seguir siendo transparentes, abiertos y confiables.
Más allá de esto, sabemos que la práctica de la participación debe evolucionar. Las expectativas de las personas están cambiando. Las comunidades exigen formas más rápidas, accesibles y contundentes de participar. La tecnología, la innovación social y los nuevos modelos de gobernanza pueden contribuir a ello.
El enfoque global del PNUD
El PNUD está afrontando el reto de introducir innovaciones en la participación:
- A nivel mundial
Mediante la colaboración estrecha (enlace disponible en inglés) con diversos socios, el PNUD está explorando enfoques de deliberación, como las asambleas de ciudadanos (enlace disponible en inglés), espacios de debate reflexivo diseñados para restablecer la confianza entre la población y las instituciones. Al mismo tiempo, se está estudiando el modo de aplicar conocimientos sobre el comportamiento para ayudar a los comunicadores públicos (enlace disponible en inglés) y los agentes de los medios de comunicación (enlace disponible en inglés) a promover un debate público constructivo, en particular sobre temas muy complejos y polarizantes. - A nivel regional
Los centros regionales del PNUD también están promoviendo enfoques innovadores para contribuir a la labor realizada en los países. Por ejemplo, el del PNUD para América Latina y el Caribe está dirigiendo la labor sobre metodologías participativas de prospectiva como base para el diálogo intergeneracional. En Asia y el Pacífico, la labor se centra (enlace disponible en inglés) en las dinámicas de poder y las vías de influencia que tienen los jóvenes en el marco de la gobernanza climática. - A nivel nacional
En decenas de países, las oficinas del PNUD —a menudo con el apoyo de la red de Laboratorios de Aceleración (enlace disponible en inglés) — están impulsando la experimentación y creando modelos prácticos que puedan ampliarse y reproducirse. Por ejemplo, en el Iraq (enlace disponible en inglés), se han utilizado macrodatos para generar nuevas conversaciones sobre el contrato social. En Macedonia del Norte (enlace disponible en inglés), se están utilizando herramientas de planificación urbana basadas en la inteligencia artificial (IA) para diseñar ciudades que tengan en cuenta las prioridades de los ciudadanos. En Sudáfrica (enlace disponible en inglés), la ciencia ciudadana está empoderando a las personas para que puedan reunir e interpretar datos que influyen en la definición de las políticas.
La democracia digital en la era de la IA
La transformación digital está reconfigurando la manera en que interactúan las sociedades. La participación no es la excepción. Plataformas que no existían hace algunas décadas han pasado a ocupar un lugar central en el modo en que las personas expresan sus opiniones y se movilizan para generar cambios. No obstante, además de oportunidades, la digitalización trae consigo riesgos: la desinformación, la exclusión y la vigilancia amenazan con socavar el diálogo democrático.
Para poder avanzar en este panorama en evolución, el PNUD se ha asociado con People Powered (Impulsado por la gente; enlace disponible en inglés) a fin de elaborar una guía (enlace disponible en inglés) sobre las plataformas digitales de participación. Esta ofrece a los encargados de formular las políticas y a la sociedad civil información prácticas sobre cómo diseñar una participación digital que sea segura, inclusiva y eficaz. Además, destaca el modo en que la IA puede contribuir a la participación, al tiempo que subraya la necesidad de aplicar salvaguardias para prevenir el uso indebido.
El camino por delante
La democracia siempre ha sido un proceso continuo, uno que constantemente nos exige cuestionar los supuestos, adaptar los enfoques e innovar con miras al futuro. En un momento en el que la gobernanza democrática está bajo una gran presión en todo el mundo, la innovación no es opcional, sino esencial.
El PNUD seguirá avanzando en este proceso, trabajando en colaboración con los gobiernos, la sociedad civil, la juventud y los innovadores en todos lados, puesto que, en última instancia, a la democracia no solo la sostienen las instituciones. Como nos recuerda el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres: “el motor de la democracia es la voluntad del pueblo: sus voces, sus decisiones y su participación”.