El titular del Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (MESCYT) y la coordinadora residente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) se reunieron hoy para tratar sobre la consolidación del ecosistema de innovación y digitalización en la educación superior.  

Durante una visita de cortesía a Franklin García Fermín, la representante del PNUD, Inka Mattila, indicó que la digitalización es uno de los ejes principales de la estrategia global de respuesta y recuperación global ante la pandemia de la Covid-19 de ahí la importancia del tema en la educación superior.  

Resaltó que la MESCyT juega un rol importante para el sistema de investigación y desarrollo, uniendo instituciones públicas, universidades y actores de sector privado en favor del cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible sobre Industria, Innovación e Infraestructura (ODS 9) y sobre Alianzas para alcanzar el logro de las metas de la Agenda 2030 (ODS 17).

Mattila puso a disposición las capacidades técnicas, así como la experiencia de la organización para el acompañamiento en el diseño e implementación de políticas que tomen en consideración productividad, inclusión y resiliencia de todas las personas.

Puntualizó que la digitalización es uno de los ejes de la estrategia de recuperación socioeconómica ante COVID-19 para el PNUD, señalando que si bien la crisis de COVID-19 representa un riesgo de ampliar las desigualdades de acceso a educación a todos los niveles, también es una oportunidad de mejorar las capacidades y repensar en la reconstrucción del sistema educativo, integrando la tecnología como eje clave para avanzar hacia el desarrollo sostenible sin dejar a nadie atrás.

En tanto, el ministro García Fermín compartió los cuantiosos esfuerzos que realizan para apoyar a las universidades y docentes en este nuevo escenario global dado por la pandemia de la covid-19, con programas de becas doctorales, asistencia para digitalización y fondos de investigación a través del Fondo Nacional de Innovación y Desarrollo Científico Tecnológico (FONDOCyT), entre otros.

También compartió la importancia que tiene para el país el fomento de la investigación aplicada como un mecanismo para superar brechas socioeconómicas e impulsar la productividad. Ambas instituciones acordaron mantener un espíritu de cooperación entorno al desarrollo de políticas basadas en evidencia, que no permita expandir las brechas digitales a nuevas generaciones.