Ciudad de México, a 28 de noviembre de 2025.- En el marco del evento regional de aprendizaje conjunto “Hacia un Océano 100% Sostenible: Planificación Oceánica y Acción Regional post-UNOC3”, organizado por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en México, la Organización de Estados Americanos (OEA) en México, la Iniciativa Ocean Action 2030 del World Resources Institute (WRI), Environmental Defense Fund y el World Economic Forum (WEF), especialistas técnicos y representantes de ministerios de América Latina y el Caribe se reunieron del 26 al 30 de noviembre, para reflexionar y analizar los Planes Oceánicos Sostenible (POS), sentando un precedente y un punto de partida para su adopción e implementación mediante la cooperación multilateral.

Los POS son una herramienta clave para integrar al océano en la toma de decisiones, proteger la biodiversidad y promover una economía oceánica sostenible en beneficio de las personas. Durante la Tercera Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos (UNOC3) se dio un paso fundamental hacia la elaboración de estos planes, que constituyen marcos estratégicos nacionales para gestionar de manera sostenible las áreas marinas bajo jurisdicción nacional, equilibrando desarrollo económico, bienestar social y salud de los ecosistemas. Los POS se sustentan en planificación espacial marina, reformas regulatorias, inversiones estratégicas y gobernanza integrada, con el objetivo de gestionar el 100% de las áreas oceánicas nacionales de forma sostenible para 2030.

México, con más de 11,000 km de litoral y una zona económica exclusiva de casi 3 millones de km², depende de sus ecosistemas marinos para el bienestar social y económico. El sector pesquero genera 350 mil empleos directos y produce 1.7 millones de toneladas de productos marinos al año. Sin embargo, las comunidades costeras —que representan el 15% de la población— enfrentan pérdida de biodiversidad, sobrepesca y eventos climáticos extremos, con impactos económicos superiores a 250 millones de pesos por evento. 

En este contexto, la agenda oceánica es altamente relevante para México por razones ambientales, económicas y sociales, y se ha convertido en un eje estratégico para cumplir compromisos internacionales y garantizar la resiliencia costera. 

El encuentro también contribuyó también al compromiso de México con la implementación del Marco Mundial de la Diversidad Biológica Kunming–Montreal (MMB-KM), particularmente a través de las 48 Metas Nacionales presentadas en 2024 ante el Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB): 

• 1.3 sobre la Política Nacional de Mares y Costas (Plan Oceánico Sostenible),
• 2.3 sobre restauración de ecosistemas marinos y costeros degradados, y
• 7.5 sobre atención a la contaminación marino-costera. 

Estas metas han sido impulsadas por la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) con el acompañamiento del PNUD, a través de los proyectos Early Action Support y Umbrella.

Desde el PNUD reconocemos el firme compromiso de México con la agenda oceánica, reflejado en proyectos e iniciativas que promueven la articulación de políticas públicas integradas. Estas acciones buscan transformar esta visión en resultados concretos, por ejemplo, impulsando la planificación y la gobernanza oceánica a través del proyecto Pacífico Sostenible (PACA) , en colaboración con el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).  

También, en el marco de la Iniciativa Climate Promise del PNUD con la SEMARNAT, México fue reconocido por incorporar medidas oceánicas en su NDC presentada en la COP 30 de Belém do Pará y por los avances hacia su próximo Plan Oceánico Sostenible. Asimismo, México incorporó este enfoque en su NDC presentada en la COP 30 de Belém do Pará, fortaleciendo la coherencia entre acción climática, conservación del océano y desarrollo sostenible.

Otro ejemplo es el trabajo desde la cuenca hasta el mar para reducir la degradación y el aporte de contaminantes a los océanos, en el marco de la iniciativa Clean and Healthy Oceans, en conjunto con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural. Además, se fortalecen prácticas de producción pesquera, turismo comunitario de naturaleza y economías azules que generan beneficios sociales y económicos para las comunidades locales, conservando y haciendo uso sostenible de la biodiversidad y los ecosistemas a través del Programa de Pequeñas Donaciones (PPD) y se complementa con iniciativas para fortalecer la integración de criterios de conservación de la biodiversidad en el turismo sostenible en playas a través del proyecto Kuxatur.