Sin saberlo, la mayoría de las veces el trabajo de los constructores es enseñar y aprender, y quizás el aspecto más importante es enseñar y aprender para la vida: aspectos como la puntualidad, el trabajo bien hecho, la comunicación acertada, la humildad en el aceptar las ideas y propuestas de otros porque cada persona desarrolla una manera de acercarse a las técnicas con su propio cuerpo, pues los oficios pasan por el cuerpo.

La cartilla nos permite plasmar aspectos del que hacer cotidiano, espacio escrito que brinda la escuela taller, permite transmitir aspectos técnicos para perfeccionar los oficios con lo cual, se va acercando la práctica hacia la excelencia.